Carta abierta de los ctenóforos (medusas primigenias) al alcalde de Sestao, Josu Bergara

Océano Atlántico
      6014 millones de años desde el inicio de la vida en la Tierra
Ciudad

      Respetado alcalde:

      Hasta aquí, a lo más profundo de los mares en los que se originó la vida animal en la Tierra, ha llegado el eco de las declaraciones en las que usted califica de «mierda» a los inmigrantes que residen en el municipio de Sestao (Vizcaya, País Vasco) y en las que deja claro que usted mismo, en su rol de primera autoridad del pueblo, se encargará de «echarlos a ostias».
  Insistimos en lo «lamentables» y «desafortunadas» que fueron sus palabras y, de paso, nos unimos a las voces de protesta que han aparecido en la última semana.
  Pero quisiéramos ir un paso más allá. Y en ese sentido, nos gustaría ponerlo al tanto de un asunto en particular: según una reciente investigación de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) en Estados Unidos, nosotros, los seres unicelulares agrupados científicamente bajo la denominación de ctenóforos, hemos sido catalogados como los organismos que precedieron la vida en la Tierra. O al menos así lo ha revelado nuestro ADN. Quién iba a creerlo: que en un cuerpo gelatinoso y de simetría radial, parecido al de las medusas, se escondiera el origen de los seres vivientes que habitan este planeta y, por supuesto, de la Humanidad.
  Otra conclusión del estudio es que los ctenóforos fuimos los primeros organismos con capacidad neuronal, aunque esta función luego fue transferida a otros seres vivos. Sin embargo, ante declaraciones como las suyas, creemos que el reparto de la misma fue desigual.
  Se preguntará usted, señor Bergara, el por qué de todo esto. Y créanos que no se debe a un mero alarde intelectual o algo parecido (al fin y al cabo, no somos más que medusas en el mar). Lo hacemos porque estamos preocupados: no tanto porque usted diga que los inmigrantes son «mierda», sino más bien porque lo piensa. Lo piensa aunque más tarde se haya disculpado públicamente. Eso es lo que más nos inquieta: la idea fija, inmóvil, sectaria de un funcionario que tiene en sus manos el gobierno de toda una comunidad.
      Quizá haga falta, antes de terminar este texto, recordarle una última cosa: también usted —al igual que todos los seres vivos, incluidos los miles de inmigrantes que residen en Sestao— tuvo un pasado de ctenóforo en algún momento de la evolución. O dicho de otro modo: también usted fue una medusa gelatinosa que alguna vez vagó por los mares primigenios.
Cordialmente,

Ctenóforos (o medusas primigenias).